El 20 de julio de 1905 falleció en San José, Uruguay, el médico español Alfonso Espínola, uno de los principales impulsores de la medicina moderna en el país sudamericano. Espínola nació un 24 de diciembre de 1845 en el municipio canario de Teguise, en la Isla de Lanzarote. Estudió Medicina en la Universidad de Cádiz y comenzó a ejercer en su isla natal. Sin embargo, en 1978, tuvo que emigrar a América por razones políticas. Allí se estableció en Montevideo, Uruguay, antes de darse cuenta de la gran afluencia de médicos en la ciudad, lo que le hizo retrasladarse a Las Piedras, un pequeño pueblo del mismo país que en aquel momento no tenía médicos.
En 1881 se desató una epidemia de viruela en el pueblo, que Espínola combatió con gran tenacidad y dedicación, sin llegar a abandonar a los enfermos. Tras este suceso se marchó a la ciudad de San José a vivir con su familia, donde continuó, además, ejerciendo la profesión médica. Espínola creó en esta ciudad el primer laboratorio microbiológico antirrábico de Sudamérica. Además de sus logros profesionales en el campo de la Medicina también destacó su carrera como docente de instituto en diferentes ramas de la ciencia, principalmente Ciencias Naturales y Astronomía.