Si de grandes actuaciones hablamos en esta segunda mitad de temporada, sin dudas que la de Jackson Chourio en la tarde de este domingo debe estar entre las mejores. ¿El motivo? Se lució nuevamente con una jugada espectacular en los jardines y conectó su jonrón más largo de la temporada.
Puede ser difícil de digerir para muchos, pero el zuliano apenas está viviendo su primera experiencia en las Grandes Ligas. Desde el mismo Opening Day se asentó como una de las piezas importantes en los Cerveceros de Milwaukee, y hasta el día de hoy sigue reafirmando porqué vale lo que vale.
Chourio y su descomunal batazo
Jackson Chourio dio una peligrosa advertencia de lo que estaba por venir. En la quinta entrada disparó un doble por el jardín central que llevó hasta el home a dos compañeros, igualando en aquel entonces las acciones. El juego en el Target Field se desarrollaba con un toma y dame entre ambas novenas, y el criollo era figura estelar de una de ellas.
En el séptimo apareció el swing de poder, de esos que incluso levanta al público rival y saca algunos aplausos por su dimensión. Una recta alta del relevista Jorge Alcalá desapareció en segundos, pues salió a una velocidad de 107.7 mph con una distancia de 443 pies. Dicho en otras palabras, era el vuelacercas más descomunal del marabino en su carrera.
Luego de que Chourio finalizara su recorrido por las bases para dirigirse al dugout, todos sus compañeros y staff técnico lo felicitaron como de costumbre. Fue entonces cuando en medio de la alegría y la incredulidad expresó un “chamo, le dí muy duro”, algo que fácilmente diría un joven de 20 años en su primer año en el mejor beisbol del mundo.
A estas alturas no se sabe si logrará o no alzar el premio al Novato del Año de la Liga Nacional, pero lo que sí es cierto es que cuenta con estadísticas que lo respaldan. Su línea ofensiva es de .253/.302/.404 luego de 87 encuentros, con 72 imparables en 285 visitas al plato, 13 dobles, 40 carreras impulsadas, 44 anotadas, 12 bases robadas y .706 de OPS.