En un contexto adverso, Bayer evalúa tomar una drástica decisión: considera declarar en bancarrota a su filial Monsanto con el objetivo de poner fin a las miles de demandas relacionadas con el herbicida glifosato en Estados Unidos. Buscaría una reestructuración a través de un tribunal.
Bayer evalúa declarar en quiebra a Monsanto
El conglomerado alemán Bayer está considerando declarar en bancarrota a su filial Monsanto en un intento por poner fin a las miles de demandas relacionadas con el herbicida glifosato en Estados Unidos, según reportó el Wall Street Journal, citando a fuentes cercanas al proceso. La empresa explora una posible reestructuración a través de un tribunal en Misuri, donde se concentra la mayoría de las reclamaciones.
La estrategia legal tendría como objetivo proteger a la empresa de mayores responsabilidades económicas. Si las negociaciones para un acuerdo extrajudicial fracasan, Bayer podría recurrir a un procedimiento de quiebra bajo el Capítulo 11 de la ley estadounidense, lo cual otorgaría a Monsanto protección frente a sus acreedores mientras se reorganiza.
Para ello, Bayer ya contrató a expertos en reestructuración de la firma Latham & Watkins y la consultora AlixPartners, quienes estarían evaluando todas las opciones disponibles. Ni Bayer ni sus asesores emitieron declaraciones públicas al respecto hasta el momento.
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Bayer: herencia legal por 63.000 millones de dólares
Bayer adquirió Monsanto en 2018 por 63.000 millones de dólares, asumiendo no solo sus activos sino también su historial legal. Desde entonces, la farmacéutica ha enfrentado una avalancha de demandas de consumidores que alegan haber desarrollado cáncer tras usar Roundup, el herbicida a base de glifosato comercializado por Monsanto.
Diversos jurados en Estados Unidos han fallado en contra de la compañía, otorgando indemnizaciones multimillonarias.
Si bien Bayer sostiene que el glifosato es seguro cuando se utiliza correctamente, el producto ha quedado en el centro de una intensa batalla legal y mediática.
La empresa decidió retirar el herbicida del mercado doméstico en EE.UU. para consumidores particulares, que representan la mayoría de los demandantes.
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Bayer podría llevar a quiebra a Monsanto: reacción de los mercados
La posibilidad de cerrar este capítulo legal fue bien recibida por los inversores. Las acciones de Bayer subieron un 1,6% en la bolsa de Fráncfort antes de la apertura del mercado, encabezando las ganancias del índice DAX.
El movimiento sugiere que los mercados ven con buenos ojos una salida que pueda contener los costos legales y limitar el daño reputacional.
Aunque una declaración de bancarrota podría tener implicaciones complejas, incluidos posibles litigios con acreedores y contratiempos reputacionales, también ofrecería a Bayer una herramienta para controlar el impacto económico de los miles de procesos judiciales abiertos.
La empresa busca de este modo poner punto final a un conflicto que debilitó su valor en bolsa y desviado su atención de otras líneas de negocio clave, como los productos farmacéuticos y la investigación genética agrícola.
Con decenas de miles de millones de dólares ya destinados a acuerdos y compensaciones, el futuro de Monsanto dentro del grupo Bayer parece cada vez más incierto. Lo que está claro es que la empresa alemana está decidida a cerrar este largo y costoso capítulo legal, aunque para ello deba pasar por los tribunales de bancarrota en EE.UU.