El segunda base venezolano de los Padres de San Diego, Luis Arráez, se ha convertido en una máquina de hits en las últimas temporadas de las Grandes Ligas. Sacudir imparables es rutina para el oriundo de San Felipe en el mejor beisbol del mundo.
Con su actuación del pasado 13 de julio, donde conectó trío de incogibles ante los Gigantes de San Francisco, “La Regadera” se consolidó como líder en juegos con tres o más hits en la Liga Nacional, acumulando un total de 10 partidos con esta destacada particularidad.
Luis Arráez en su “salsa”
Previo al 13 de julio, Arráez había experimentado una racha de juegos sin tres indiscutibles, siendo su último encuentro con esa cantidad el 29 de junio. Sin embargo, el pelotero de los Frailes ha demostrado su increíble capacidad para hacer contacto con la pelota.
Se ha colocado a un par de conexiones del liderato de hits en las Grandes Ligas, actualmente cuenta con 122 y está por detrás de Bobby Witt Jr. (124). Además, se mantiene en la lucha por el liderato de bateo en la Liga Nacional con un promedio de .310, solo superado por Shohei Ohtani (.314).
La consistencia y el talento de Arráez han sido piezas claves en el éxito de los Padres de San Diego durante la temporada. La facilidad con la que conecta hits regularmente, sumado a su alto promedio de bateo y su disciplina en el plato, lo convierten en un bateador fundamental para la alineación del equipo.
Un futuro brillante
Con solo 27 años de edad, Luis Arráez se encuentra en el apogeo de su carrera y tiene un futuro brillante por delante. Su ética de trabajo lo posicionan como un jugador con el potencial de convertirse en una figura dominante en las Grandes Ligas por los próximos años.