En un duro golpe para los amantes de las manualidades y las telas, Joann Fabrics, la icónica cadena estadounidense de tiendas de artículos para manualidades, anunció el cierre de aproximadamente 500 de sus 850 sucursales en todo el país. Esta noticia llega tras la segunda declaración de bancarrota de la empresa en menos de un año, lo que generó preocupación entre sus empleados y clientes.
La decisión de cerrar tiendas es parte de un plan de reestructuración más amplio que busca “ajustar el tamaño de su presencia en tiendas”, según un comunicado emitido por la empresa. Joann se declaró en bancarrota en enero de 2024 y, aunque logró salir de ella en marzo del mismo año, la compañía no ha logrado recuperarse por completo.
Lee también
“Esta fue una decisión muy difícil de tomar, dado el gran impacto que sabemos que tendrá en nuestros miembros del equipo, nuestros clientes y todas las comunidades que servimos”, decía el comunicado que Joann entregó a USA Today. Y amplía: “Un análisis cuidadoso del rendimiento de las tiendas y de la futura adecuación estratégica para la empresa determinó qué tiendas deben continuar operando normalmente en este momento”.
La empresa presentó una lista de las tiendas que cerrarán al tribunal como parte del proceso de bancarrota bajo el Capítulo 11. Aunque no se publicó una lista oficial para el público, los documentos judiciales revelarían que las tiendas afectadas se encuentran en 49 de los 50 estados del país, siendo Hawái el único estado donde no se anunciaron cierres.
JoAnn Fabrics está en un difícil momento
Los estados más afectados por esta ola de cierres incluyen California, Florida, Michigan, Ohio, Pensilvania, Illinois, Nueva York, Washington e Indiana. Se espera que estos cierres tengan un impacto significativo en las comunidades locales, donde las tiendas Joann a menudo sirven como centros para aficionados a las manualidades y pequeños empresarios.
La noticia del cierre de tiendas generó una gran preocupación entre los empleados de Joann, quienes temen perder sus empleos. La empresa expresó su pesar por el impacto que esta decisión tendrá en sus empleados, clientes y las comunidades a las que sirven.