La cadena de farmacias Rite Aid anunció el cierre de 68 de sus sucursales en el oeste del estado de Nueva York, lo cual se traducirá en la pérdida de más de 700 empleos a partir de la próxima semana. Según documentos presentados ante las autoridades laborales estatales, estas tiendas dejarán de operar como parte del proceso de bancarrota bajo el Capítulo 11 que inició nuevamente la empresa a comienzos de este mes. Los condados afectados incluyen Erie, Niagara, Chautauqua, Cattaraugus, Genesee y Wyoming.
Rite Aid cierra tiendas y centros de distribución en todo el país
Este es el segundo año consecutivo en el que Rite Aid entra en un proceso de reestructuración financiera bajo protección legal de quiebra. Como resultado, la compañía está llevando a cabo una serie de ajustes operativos que incluyen el cierre de múltiples establecimientos comerciales y centros logísticos en diferentes estados. El objetivo principal es reducir costos y buscar opciones viables para continuar operando bajo nuevos términos financieros.
La cadena de farmacias Rite Aid cerrará más de 80 sucursales en Nueva York.
En este contexto, los cierres programados en Nueva York forman parte de una estrategia nacional que también ha impactado otras regiones del país. La medida no solo afecta a los empleados directos de las farmacias, sino también a proveedores locales y comunidades que dependen de estos puntos de venta para acceder a medicamentos y servicios básicos de salud.
Más de 700 empleos afectados y futuro incierto por el cierre de las farmacias
Los trabajadores de las 68 farmacias ubicadas en el oeste de Nueva York enfrentarán la pérdida de sus puestos a partir del próximo 4 de junio, fecha en que comenzarán los cierres. Aunque Rite Aid ha expresado su intención de colaborar con otras cadenas farmacéuticas y minoristas para garantizar la continuidad del servicio a sus clientes, no hay asegurado que estas alternativas mantengan la misma ubicación ni ofrezcan nuevas oportunidades laborales a los empleados despedidos.
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Este anuncio representa un duro golpe para muchas familias latinas que residen en la región y que podrían verse afectadas tanto económica como socialmente. En medio de un panorama complejo para el sector retail y la salud en Estados Unidos, la situación de Rite Aid refleja las dificultades que atraviesan varias empresas tradicionales frente a la competencia de grandes almacenes y plataformas digitales.
La comunidad seguirá atenta al desarrollo de los eventos, mientras grupos laborales y autoridades locales buscan apoyar a los trabajadores afectados en la búsqueda de nuevas oportunidades de empleo.